Higiene del gato: ¿qué cuidados se deben dar?
¡Un gato está limpio! Sin embargo, debes permanecer atento a ciertos aspectos de tu higiene. Algunas razas requieren cuidados especiales.
Piel y pelaje
Según la raza, la piel y el pelaje de tu gato requerirán más o menos atención. Todos los gatos merecen un cepillado regular. Por otro lado, la frecuencia del cepillado varía según la naturaleza del pelaje: cuanto más largo sea el pelo y más denso el pelaje, más frecuente debe ser el cepillado.
La atención diaria es necesaria para gatos con pelo largo y lanudo como el persa. Estos gatos deberán cepillarse a diario para evitar que se formen nudos. También puede ser necesario lavarlos con champú. Estos gatos requieren cuidados diarios. Por lo tanto, el cepillado es fundamental para el persa, el sagrado birmano, el maine coon, el ragdoll, etc. Por el contrario, hay gatos llamados "gatos desnudos" como el Sphynx o el Devon Rex. Su piel es muy frágil y requerirá un cuidado especial. Y sobre todo, ¡cuidado con el sol!
Ojos y nariz
Normalmente, el gato no requiere cuidados especiales, a excepción de los gatos conocidos como braquicefálicos, es decir con la nariz aplastada. Este es el caso del persa, el British Shorthair, el Exotic Shorthair. Es necesario que estos gatos cuiden sus ojos. Es necesario limpiar los pliegues regularmente para evitar infecciones, particularmente los pliegues en la esquina de los ojos y alrededor de la nariz. Deberá utilizarse una solución adecuada.
Boca y dientes
¡Es difícil decirte que cepilles los dientes de tu gato! Y es que no es necesario cepillar los dientes de los gatos, a no ser que tu gato padezca un problema bucal específico... Por otro lado, un examen periódico del interior de la boca puede ser beneficioso para detectar muy rápidamente problemas con los dientes, malas aliento, heridas, enrojecimiento.
Orejas y pabellones
Los gatos tienen orejas erguidas por lo que no son muy propensos a las otitis. ¡Muy móvil, el pabellón de la oreja es un verdadero radar que capta sonidos! Sin embargo, tenga cuidado si se forma un depósito negro y su gato se rasca constantemente las orejas: puede ser un ácaro del oído que requerirá una visita a su veterinario. De vez en cuando, recuerda comprobar que las orejas estén limpias y libres de rojeces, sobre todo si tu gato empieza a rascarse las orejas o a sacudir la cabeza.
Garras y patas
Es importante cuidar las patas de tu gato, especialmente si es un gato de interior. Un rascador es esencial para que pueda rascarse. Puede ser apropiado cortar delicadamente sus garras con regularidad. ¡Tenga cuidado de no cortar demasiado, de lo contrario sangrará! Si esto sucede, entonces es necesario esperar presionando muy fuerte sobre la garra o hacer un pequeño vendaje. ¡Para un gato que sale, deja las garras en paz! Tu gato necesita sus garras para trepar a los árboles y las garras se gastarán solas.
Revise regularmente las garras, las almohadillas, la parte inferior de las patas y los espacios entre los dedos para asegurarse de que todo está bien, que nada está atascado y que no se ha formado ninguna herida.